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La Importancia de los Datos Catastrales en las Infraestructuras de Datos Espaciales


 En la era digital actual, donde la información geoespacial y las IDEs como medio para disponibilizarla, desempeñan un papel crucial en la toma de decisiones y el desarrollo sostenible, los datos catastrales se erigen como pilares fundamentales. Estos datos, que describen la realidad física y legal de los bienes inmuebles, no solo son básicos sino esenciales para una gestión eficiente del territorio.


Datos Básicos y Fundamentales


En una primera aproximación se considera como fundamental a los datos geoespaciales básicos de cobertura nacional o local y que a su vez representan los objetos geográficos más relevantes para el desarrollo del país. Estos datos son producidos por diferentes organizaciones o instituciones involucradas en la toma de decisiones tendientes a impulsar el desarrollo sostenible. Los datos considerados como básicos deben estar disponibles y ser fuente fiable para la generación de nuevos datos.


La determinación de los datos fundamentales resulta de suma importancia para los organismos e instituciones que conforman IDERA, pues son considerados esenciales para la realización de proyectos que involucran IG generada por las instituciones de cada sector específico (Estándares y normas IDERA).


La Información catastral


La información catastral es consideradas dentro del catálogo de Datos Básicos y Fundamentales defindo por IDERA por varias razones. En primer lugar, sirven como referencia primaria para la ubicación geoespacial de las propiedades, permitiendo una visualización precisa de la distribución de la tierra. Esto es crucial para entender la dinámica urbana, identificar áreas de crecimiento potencial y planificar la infraestructura necesaria.


Los datos catastrales forman el pilar de la información geoespacial en cualquier IDE, proporcionando información detallada sobre la propiedad, límites territoriales y características físicas de una parcela de tierra. La importancia radica en su capacidad para integrar y contextualizar otros conjuntos de datos geoespaciales. Estos datos no solo sirven como referencia para la planificación urbana y rural, sino que también respaldan la toma de decisiones en áreas tan diversas como la gestión de desastres, la infraestructura vial, y el desarrollo económico.


Estos datos, que describen la propiedad y la configuración del suelo, son la fuente primaria de información en una amplia gama de aplicaciones, desde la planificación urbana hasta la toma de decisiones gubernamentales. Su importancia radica en su capacidad para proporcionar información precisa y detallada sobre la propiedad y el uso del suelo, facilitando así un desarrollo sostenible y una gestión territorial efectiva.


Datos Catastrales de IDELP


Dentro de este contexto, los datos catastrales de la Infraestructura de Datos Espaciales de La Pampa ocupan un lugar destacado. Estos datos no solo ofrecen información detallada sobre la propiedad de tierras, incluyendo la nomenclatura y partida catastral y sus límites. También facilitan la integración con capas de información adicional, generando nuevos productos cartográficos como los mapas de valores de tierra y zonas de emergencia agropecuaria.


IDELP proporciona un marco estructurado para la recopilación, almacenamiento y distribución de datos catastrales, asegurando su accesibilidad y utilidad para una variedad de usuarios, desde autoridades gubernamentales hasta el público en general. Al centralizar y poner a disposición estos datos, se contribuye a la eficiencia administrativa, la transparencia y la equidad en la toma de decisiones. La accesibilidad a los datos catastrales de IDELP beneficia a las autoridades locales permitiéndoles tomar decisiones informadas sobre su entorno y participar activamente en procesos territoriales.


En conclusión, los datos catastrales no son meramente puntos o polígonos en un mapa; son la base sobre la cual se construye una gestión territorial inteligente. Su inclusión en las Infraestructuras de Datos Espaciales garantiza que la información geoespacial sea completa, precisa y, lo más importante, relevante para el crecimiento y bienestar de una comunidad.



Un poco más de información: Conformación del Catastro de La Pampa


La división del territorio pampeano, se realizó en base a un sistema regular de lotes cuadrados ordenados jerárquicamente de la siguiente manera:

  • Secciones: En total son 20, cada una tiene una superficie de 1.000.000 de has, algunas menos y son designadas con números romanos. 
  • Cada sección se dividió en 4 Fracciones de 250.000 has y se designan con letras mayúsculas, en sentido de las agujas del reloj.
  • Cada Fracción se dividió en 25 lotes de 10.000 ha (designados con números consecutivos). Los lotes están separados entre sí por una calle, ese es su límite físico. A su vez, un lote se puede subdividir en distintas parcelas rurales.




 Ley Provincial de Catastro (Nº 935)


A los efectos de la clasificación catastral, las parcelas serán consideradas integrantes de:


  • a) Planta urbana: se considera parcela componente de la planta urbana a la proveniente de un fraccionamiento que originó bloques cuyas superficies no excedan de una y media (1,5) hectáreas rodeada por calles;

  • b) Planta suburbana: se considera parcela componente de la planta suburbana a la proveniente de un fraccionamiento que originó bloques cuyas superficies no excedan de diez (10) hectáreas y sean mayores de una y media (1,5) hectáreas, rodeada por calles.

  • c) Planta subrural: se considera parcela componente de la planta subrural, a la proveniente del fraccionamiento que originó bloques cuyas superficies no excedan de cien (100) hectáreas y sean mayores de diez (10) hectáreas, rodeadas por calles; y

  • d) Planta rural: las no comprendidas en las plantas antes mencionadas.



Por otro lado, las parcelas serán individualizadas con una nomenclatura catastral inamovible, establecida por la Dirección General de Catastro, la que responderá a los siguientes conceptos:


  1. Urbanas: ejido, circunscripción, radio, manzana y parcela;

  2. Suburbanas: ejido, circunscripción, radio, quinta y parcela;

  3. Subrurales: ejido, circunscripción, chacra y parcela; y

  4. Rurales: sección, fracción, lote y parcela.


Ejemplo de nomenclatura de una parcela rural:  IV – C – 13 – 3  (sección – fracción – lote - parcela)